En Fuendetodos ha pintado uno de estos rostros en escala de grises y que se hace visible desde la entrada al pueblo. Este espectacular mural lo encontramos justo en frente de la Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción. Además de ese rostro femenino, los elementos que más llaman la atención del observador son, por un lado la flecha que atraviesa el rostro, que simboliza la particular locura de cada artista y, por otro, el palillo en su boca, que transmite la sensación de comodidad y confort a la vez que nos evoca al mundo rural y a la gente de pueblo con el palillo en la boca. Danjer nos tiene acostumbrados a figuras coloristas, excéntricas y casi futuristas propias de un genio artístico, pero aquí se decanta por una figura femenina en sobrios colores blanco, negro y gris, que sería el punto que lo uniría a la obra de Goya, a sus grabados concretamente.